El titanio es un metal increíblemente versátil y útil, y una de sus principales aplicaciones es la industria marina. Las características únicas de este metal lo hacen adecuado para muchas aplicaciones marinas, incluida su notable resistencia a la corrosión, peso ligero, alta resistencia y baja expansión térmica. A continuación se detallan algunas de las aplicaciones críticas del titanio en la industria marina:
El titanio se utiliza ampliamente en la construcción naval debido a su resistencia al agua salada, que es la principal causa de corrosión en el entorno marino. La excelente relación resistencia-peso del metal también lo convierte en un material ideal para muchos componentes de los barcos, incluidos tanques de combustible, ejes de hélice y otras piezas estructurales.
En la exploración de las profundidades marinas es fundamental que todos los materiales en contacto con el agua de mar sean altamente resistentes a la corrosión, y el titanio es el material perfecto para esta aplicación. La capacidad del metal para mantener su integridad en entornos de alta presión y su resistencia a la corrosión lo hace perfecto para aplicaciones de "fondo de pozo", como componentes de equipos de perforación.
Uno de los usos más comunes del titanio en la industria marina es para la producción de válvulas. Las válvulas tienen muchas aplicaciones en entornos marinos, incluido el control del flujo de agua y la regulación de pozos de petróleo y gas en alta mar. La resistencia del metal a la corrosión del agua de mar y a la erosión química garantiza que estos componentes tengan una vida útil más larga que los materiales tradicionales.